El desayuno es la comida más importante de la jornada, el momento en que comenzamos nuestro día. No se necesitan metros extra ni grandes inversiones para tener un rincón de desayuno en casa, solo basta con encontrar el sector ideal, un espacio coqueto en el que podamos reunirnos por las mañanas. Tener una cocina pequeña no es motivo para renunciar a un espacio desayunador, de hecho, una pared sin utilidad puede transformarse en tu rinconcito preferido. Hoy te dejamos algunas ideas para crear un rincón de desayuno en tu casa.
Elegir el lugar
Lo primero es definir en dónde armaremos nuestro desayunador y para ello debemos tener en cuenta la distribución de nuestra cocina y el espacio disponible. Si disponemos de suficiente espacio en nuestra cocina, existen diferentes opciones que te ayudarán a disfrutar de su amplitud y comodidad. Si nuestra cocina es más pequeña, deberemos aprovechar cada rincón disponible: frente a la zona de alacenas, la zona de la ventana, una mesa de pared abatible, un rincón olvidado, etc. Todas estas opciones están pensadas para aprovechar el espacio al máximo y dar el mismo servicio en un espacio más reducido.
Mobiliario funcional y adaptable
Los muebles funcionales son la solución a muchos problemas que trae la falta de espacio. En cocinas o comedores pequeños, los muebles funcionales resultan grandes aliados para optimizar el espacio disponible. Si tu espacio es muy reducido, podes integrar este rincón en algún mueble de la cocina, en forma de barra deslizante o incorporarlo en un armario. Las mesas plegables que se abren y se cierran según sus usos son sin lugar a dudas la mejor elección para montar tu desayunador. Otra alternativa son las mesas redondas, ya que ocupan mucho menos espacio que otras y están a la última moda. Si montás tu rincón desayunador sobre una esquina, en lugar de sillas tradicionales podés colocar un banco amurado, ya que en el espacio que ocupan dos sillas, en un banco se sientan tres. Para que sea más cómodo añadí almohadones o una colchoneta y si lo hacés a medida podés diseñarlo con espacio de almacenaje en la parte inferior.
Barra de desayuno
Las barras de desayuno siguen siendo una tendencia. En las cocinas más angostas son siempre un acierto. Elegí la pared en la que no tengas ningún otro mobiliario para colocarla y para lograr mayor fluidez, puede plegarse luego de usarla sin ocupar mayor espacio. Unos taburetes altos de cocina y que se oculten bajo la misma barra cuando no los usemos bastarán para dar forma a este pequeño rincón en el que tomarnos el café todas las mañanas. Si no contás con el espacio suficiente para una barra en la mitad de la cocina a modo de separador, podés optar por adosar una al ras de la ventana o en un pasillo cercano a la cocina.
Color
Los colores en nuestra zona de desayuno también son importantes. El color nos ayuda a diferenciar y sectorizar los espacios en cualquier habitación, por ello usarlos correctamente nos ayudará a construir y delimitar nuestra zona de desayunador. Los colores que utilices para este rincón tienen que complementarse con los que has utilizado para decorar la cocina. Aunque sigamos con la estética general de nuestra cocina o del ambiente de la casa, deberemos tener en cuenta que los colores claros y los tonos más vivos como el naranja, rojo o amarillo abren el apetito, nos aportan energía y vitalidad y nos ponen de buen humor.
Iluminación
En cuanto a la luz, es importante ubicar nuestro rincón dedicado al desayuno en una zona cercana a una ventana con vistas a la calle o al jardín. Esto nos aportará sensación de bienestar y nos ayudará a despertarnos de forma agradable, con la ayuda de un buen café con tostadas.
Si nuestra ventana no recibe luz directa o da a un patio interior, podemos reforzar la iluminación natural con una lámpara de luz cálida y ligeramente difusa (anaranjada o ligeramente amarillenta), que dé luz pero sin resultar molesta.
Infaltables: los complementos
Los diferentes elementos decorativos que utilices para este rincón son los que te ayudarán a crear ambientes acogedores y darle el toque final a tu rincón de desayuno. Son muchos los objetos que podés utilizar para dar un toque personal a este rincón, desde almohadones, tazas, velas, flores, manteles, cuadros, etc., siempre debés tener en cuenta que estos tienen que estar en armonía con el resto de la decoración del espacio. Otro buen anexo a tener en cuenta al elegir este espacio en tu cocina es destinar que haya cerca cajones o unos estantes para poner todo lo necesario junto: teteras, tazas, infusiones, etc.
POR JULIETA VARRONI