Desde febrero que los valores que fijó Energía de la Nación para el alcohol que las plantas entregan a las petroleras se mantienen sin cambios, a pesar, incluso, de que los combustibles sí ajustaron frecuentemente sus precios en el surtidor.
Esto provoca una ventaja a las petroleras porque mantuvieron al menos el 12% de su producto sin cambios de valor en medio de una turbulencia de precios.
De acuerdo a lo que explican las etanoleras, la situación empieza a ser crítica, pero no se agravó más aún porque el precio del dólar se mantiene estable y el valor del maíz se sostiene en niveles medios. “Si el dólar o el maíz hubiesen subido, las empresas productoras de etanol estarían en serias dificultades”, explicaron desde el sector.
Lo cierto es que el litro de etanol de maíz mantiene un valor de $ 536,983 mientras que el de caña de azúcar, de $ 584,180. En el anterior ajuste, que fue el 28 de diciembre, los valores fueron de $463,911 y $465,840 respectivamente.
Es decir, en los últimos 3 meses y medio sólo recibieron un incremento del 15,75% cuando la inflación de enero fue 20,6%, la de febrero alcanzó el 13,2% y marzo, que se conocerá hoy, se ubicaría en torno al 10 o 12 por ciento según las estimaciones de las consultoras.
De todos modos, vale destacar que la industria viene con plena actividad, especialmente la del maíz que en Córdoba tiene su bastión más importante. Según los datos de 2023, la provincia aportó más del 50% del etanol del país, computando allí tanto la producción que se realiza a base de maíz como la de caña de azúcar en el norte.
Si se toma en cuenta sólo el etanol de maíz, Córdoba explica el 75% de su producción, con tres fábricas que poseen una capacidad instalada de producción anual conjunta de 588 mil metros cúbicos: ACABio (Villa María), Promaíz (Alejandro Roca) y Bio4 (Río Cuarto).