Pero no es el único dato que demuestra el deterioro del mercado laboral local. Hay otro al menos igual de llamativo: el de aquellos que teniendo ocupación están buscando otra para sustituir la actual -se supone que en mejores condiciones cualitativas y/o de ingresos- o bien complementarla. Ese grupo de riocuartenses tuvo un crecimiento exponencial: pasó de 2 mil a fines de 2023 a 11 mil en el último tramo de 2024. Se multiplicó por 5,5. Allí hay una clave para entender algo que los analistas del mercado laboral repiten y es que el ajuste no se reflejó tanto por puestos de trabajo como por calidad del empleo, entendiendo allí condiciones laborales y salariales.
En Río Cuarto hay unas 21 mil personas con problemas laborales entre los desocupados, los ocupados que buscan otro empleo y los que están subocupados.
En esa misma línea se puede agregar otra características más: la categoría subocupados, es decir, aquellos que trabajan menos de 35 horas semanales por cuestiones involuntarias, pasaron de 1.000 personas a 6 mil.
Si finalmente se hace un balance de los datos del Indec, en Río Cuarto hay unas 21 mil personas con problemas laborales entre los desocupados, los ocupados que buscan otro empleo y los que están subocupados.
Como correlato de ese deterioro interanual, finalmente cayó la cantidad de riocuartenses ocupados. Allí la cifra se redujo de 82 mil a 81 mil pero con una población económicamente activa que creció de 84 mil a 86 mil. Esa última categoría hace referencia al total de personas que están en el mercado laboral, con o sin trabajo pero buscándolo.
Resulta interesante sumar en este punto que la población total del Gran Río Cuarto, de acuerdo a la Encuesta Permanente de Hogares del Indec, creció de 182 mil a 183 mil entre fines de 2023 y fines de 2024. Es decir que, claramente hubo un crecimiento relativo de las personas que se volcaron al mercado laboral. Mientras el crecimiento demográfico fue de mil personas, el mercado laboral creció en 2 mil. Presumiblemente una proporción mayor de personas necesitó buscar trabajo.
En el país
En el cuarto trimestre de 2024, la tasa de desocupación en los 31 aglomerados urbanos de Argentina se ubicó en 6,4%, lo que representa una suba de 0,7 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del 2023 (5,7%).
No obstante, registró una caída de 0,5 puntos respecto del trimestre anterior, cuando había alcanzado el 6,9%. A nivel regional, el Gran Buenos Aires presentó la tasa de desocupación más alta (7,1%), mientras que la Patagonia registró el menor nivel (4,0%). La Región Pampeana, que incluye a Córdoba, sumó el 6,9%.
En cuanto a la composición de la población desocupada, el 72,5% lleva menos de un año en búsqueda activa de empleo, mientras que el 27,6% supera los 12 meses en esta situación. Además, el desempleo sigue afectando en mayor medida a las mujeres, con una tasa del 6,9%, frente al 6,1% registrado en los varones.
En cuanto al tamaño de los aglomerados, la tasa de desempleo fue inferior en los aglomerados de menor población: en los que cuentan con menos de 500.000 habitantes, resultó de 4,2% de la población económicamente activa, mientras que se posicionó en 6,9% en aquellos con 500.000 y más habitantes.
En referencia al nivel educativo de las personas desocupadas, el 71,2% cuentan con hasta secundario completo, y el 28,9% presentan nivel superior y universitario, completo o incompleto.
El informe también destaca que la presión sobre el mercado laboral, que incluye desocupados, subocupados y ocupados que buscan otro empleo, se incrementó 2 puntos porcentuales en términos interanuales, alcanzando el 29,4% de la población económicamente activa.
Leve mejora en la comparación intertrimestral
Cuando los datos del Indec se comparan no ya con el mismo período del año anterior sino con el trimestre previo, el último tramo de 2024 luce levemente mejor que el período de julio a septiembre de ese año. En el caso de la desocupación, la cifra bajó del 5,8% al 5,2% entre el comienzo y el final del segundo semestre. Eso implicó que la cantidad de personas que buscaron empleo y no lo consiguieron pasó de 5 mil a 4 mil personas en la ciudad.
En cambio, se observó un crecimiento en la cantidad de personas que aun con empleo buscan otro: pasaron de 10 mil a 11 mil durante ese período; y también aquellas que estaban subocupadas, que de 4 mil pasaron a ser 6 mil.