“Es un gran logro para nosotros después de 30 años de trabajo en la raza poder presentarnos en Palermo”, comenzó relatando Leonel Alisio, decano de la Facultad donde todo comenzó.
“Nació como objetivo de la Facultad y sus establecimientos agropecuarios con la idea de buscar una herramienta productiva, en este caso bovina, para producir carne eficiente en zonas desfavorables, zonas semiáridas, subtropicales y tropicales donde el ambiente dificulta que los animales más propios de la Pampa Húmeda tengan una buena adaptación”, agregó el directivo en diálogo con Tranquera Abierta.
Alisio recordó que “el Ingeniero Oscar Melo, que era decano de la facultad en ese momento, comenzó con el trabajo de investigación teniendo ese objetivo de buscar un cruzamiento para la formación de un compuesto de raza para producir en esas zonas. Y se buscó una raza africana que es la raza Tuli que tiene las características de adaptación a temperaturas extremas, a forrajes de baja digestibilidad, que es de origen bos taurus por lo cual tiene todas las actitudes carniceras. Y se la cruzó con las razas que venía trabajando la universidad, como las británicas Hereford y Aberdeen Angus y una continental como el Simmental”.
Y agregó: “Lo más importante es que proviene de una universidad que es privada y gracias a un gran trabajo de investigación. Y lo que nos nutre es que nuestros estudiantes que participan, ven este proceso productivo”.
¿Es una raza estabilizada?
Al tener tantos años de desarrollo, la raza está consolidada, estabilizada. Y tiene importantes características de fertilidad, precocidad, mansedumbre, habilidad materna y calidad de carne. El año pasado participamos en Palermo con novillos y sacamos primer premio, mientras que este año sacamos el segundo. Ahí competimos con las razas británicas demostrando que se puede producir eficientemente, con calidad de carne en zonas del noroeste o norte argentino.
¿Qué se tiene en cuenta en ese concurso de novillos?
Se clasifica la media res, porque llegan animales de 450 kilos, diente de leche y se evalúa terneza, color, área de ojo de bife, rendimiento. Son parámetros que se hacen en frigorífico. Sin dudas que la raza tiene una gran calidad carnicera que era uno de los principales objetivos.
¿Pueden adaptarse a la Pampa Húmeda?
Sí, pueden estar sin problemas. De hecho tenemos productores ahí, también en San Luis, La Pampa, Mendoza o La Rioja. En casi todo el país prácticamente hay, y hasta tenemos interesados en llevar la raza más al sur, a la Patagonia, porque el Tuli, que viene de Sudáfrica, también vive en zonas de nieve y montaña. Se adapta tanto al frío como al calor. Y en Palermo tuvimos jurados de Paraguay y Uruguay porque la genética ya se está consolidando en los dos países. Además, ya tenemos animales en Brasil y próximamente en Bolivia.
¿Hay una estimación del rodeo nacional?
En el país hay unos 350 mil vientres que tienen influencia de raza San Ignacio. Y como es una herramienta de mejora genética, se cruzan incluso con otras razas. Y como otra de las virtudes que tiene es la facilidad de parto, se usa mucho en otras razas para servicios temprano en vaquillonas porque se aseguran la facilidad de parto.
¿Cómo les fue en Palermo?
Obtuvimos el primer campeón de la historia en la pista de Palermo y el reservado gran campeón. Y trajimos además la raza Tuli, con el que sacamos el gran campeón. Son todos animales de la universidad.
¿Y exportan embriones?
Sí, ya lo hicimos en 2005, junto con semen, a Paraguay. La Universidad tiene un centro de reproducción animal del que fui director hasta hace un año y medio y ahí nos dedicamos a eso. Tenemos habilitado el centro para vender dentro del país y exportar a Mercosur y comunidad europea.
¿Qué características tiene el toro San Ignacio campeón?
Caldén es un toro de frame moderado, muy carnudo, algo que fue muy destacado por el jurado; se desplaza muy bien, tiene un prepucio muy adaptado para la zona donde va a trabajar y de un color más requemado, y unos 800 kilos.