Hubo alto acatamiento en el transporte, la recolección de residuos, los bancos, las escuelas públicas y la UNRC.
Pero el impacto fue menor en los comercios y la administración pública de la ciudad.
Por ejemplo, Pami y Anses abrieron sus puertas porque, según trascendió, sus trabajadores temían perder sus empleos.
Si bien los bancos cerraron, un grupo de empleados del Nación decidió no acatar la medida.
Las paradas de colectivos permanecían desiertas, lo que hablaba a las claras de la alta adhesión al paro que hubo en el sector del transporte.
En las escuelas públicas locales el acatamiento fue mayor que en las privadas, mientras que en la Universidad no hubo actividad académica.
En la Municipalidad hubo guardias mínimas, sobre todo en lo atinente al servicio de salud.
Por su parte, la CGT y la CTA convocaron a una concentración en la Plaza Roca, donde se llevó a cabo una radio abierta.
La CGT y la CTA convocaron a una concentración en la Plaza Roca, donde se hizo una radio abierta. Entregaron al Concejo un petitorio.
Previamente, les entregaron a las autoridades del Concejo Deliberante un petitorio para que lo eleven al Senado, en contra de la nueva Ley Bases que se está analizando en la Cámara Alta.
En sintonía
La medida de fuerza que se hizo en la ciudad fue en sintonía con la que se decidió a nivel nacional y se replicó, también, en la capital provincial.
Los dirigentes gremiales se manifestaron satisfechos con el nivel de participación que hubo en la concentración convocada.
Entretanto, encuestas callejeras que realizaron medios de comunicación locales dieron cuenta de que el ciudadano común y corriente no estaba a favor del paro general.
En ese sentido, hubo comercios, bares, confiterías y supermercados del microcentro que trabajaron normalmente.