Juan Santiago, emprendedor tecnológico, fundó Santex, una compañía desarrolladora de software que emplea cerca de 500 personas, estuvo presente en Río Cuarto durante la experiencia Endeavor de la ciudad.
Su presentación, ante unas dos mil personas, se basó en la irrupción masiva de la inteligencia artificial en nuestras vidas. Una tecnología que no es nueva pero que desde el 30 de noviembre del año pasado se coló en la vida y desarrollo laboral de muchísimas personas estando al alcance de todos a partir de la plataforma ChatGPT. A partir de entonces la vimos aparecer en noticias falsas, pero también en el diseño de multiplicidades de contenidos.
¿Es bueno tener miedo a esta tecnología? Se preguntaba el emprendedor desde arriba del escenario en el salón central de la Sociedad Rural de Río Cuarto. Y la respuesta fue sí. “Porque nos hace estar en alerta”, dijo.
Respecto de “los miedos y las esperanzas que conlleva esta nueva tecnología, lo más importante es saber que no hay ‘Deshacer’. Y eso juega un rol predominante en las decisiones que tomamos, esto hace que no se pueda volver atrás”, señaló.
Planteó que es importante prestar atención a la IA y “elevar nuestro nivel de conciencia porque hay mucha gente atrás del negocio de la IA”.
Actualmente, esta tecnología representa un mercado sin límites estimado en US$ 136.55 billones en 2022. Y está proyectado a US$ 1811.8 billones en 2030. “El tamaño de la oportunidad es inmenso”, destacó para luego agregar que mucha gente compara este momento cuando no existía la electricidad y existió, o cuando no había internet y finalmente llego. Sin embargo, Santiago dijo que “esto no tiene nada que ver con eso, pues es increíblemente superior en impacto, no podemos entendemos a la velocidad a la que avanza este desarrollo”.
Hasta acá y hacia adelante, esto parece tener un impacto en ámbitos como “la producción de trabajo, el ahorro en la personalización, ahorro de tiempo, pero también, el ahorro en calidad de lo producido, esas son las cuatro áreas en las que la IA va a tener un rol importantísimo”, sentenció el experto.
¿Cómo enfrentarnos a esto?
Tenemos que empezar a entender que tenemos que cambiar nuestros paradigmas de cómo actuamos. Nada de lo que puede suceder con IA va a suceder si nosotros, los usuarios, no nos involucramos de la manera en que las grandes compañías quieren que nos involucremos, de esto es de lo que tenemos que tener absoluta conciencia.
¿Por qué cada vez dependemos más de estas herramientas?
La tecnología nos esta poniendo en ese instante de dejar de tener un razonamiento crítico de si algo está bien o está mal. Ahora, ¿quién dice si algo está bien o está mal? Entonces, el nivel de influencia que esta tecnología está teniendo sobre nosotros nos lleva absolutamente a tener cuidado. Actualmente, cuando hablamos de tecnología hablamos de ética y valores, ya no hablamos de lenguajes de programación, necesitamos tener enfoques hacia valores más humanos. Para eso hay que empezar a pensar en el largo plazo, los logros individuales hay que pasarlos a colaborativos y globales.
Avanzar en una IA productiva pero con cuidados…
Los empresarios estamos acostumbrados a la productividad, asociamos la productividad con el hacer. Si no estamos haciendo algo, no estamos siendo productivos. Entonces, mi mensaje es que hoy es uno de esos momentos en el mundo en los que tenemos que priorizar la asertividad a la velocidad. Acá es muy importante no errarle, porque no hay ‘Deshacer’. Entonces, si nosotros vamos a priorizar la velocidad para llegar a un mercado antes que otro (actor) pero me equivoco, eso me habrá costado recursos económicos. A ese laboratorio los empresarios estamos acostumbrados. Pero en términos de inteligencia artificial, lo vamos a pagar muy caro, porque no se puede volver atrás. Lo mal hecho, mal hecho está y mal hecho va a quedar. Entonces, es muy importante que nos tomemos el tiempo para pausar y analizar exactamente qué queremos como resultado, y que apuntemos bien al target antes de apretar el gatillo.
¿Cuál es el impacto de esta tecnología en plataformas de transacciones como Agrotoken?
El impacto es mundial, en algunos países más desarrollados o menos desarrollados, en diferentes sectores o regiones, las oportunidades serán más obvias o serán más rápidas por el uso de la inteligencia artificial a diferencia de otros países con un desarrollo tecnológico mayor. Entonces sí puede haber alguna diferencia, sobre todo en Latinoamérica, donde las oportunidades en la bancarización no son iguales para todos, hay mucho sector no bancarizado con mucha informalidad, por lo tanto hay mucho para innovar ahí. Igual yo creo que el impacto es global, no lo llevaría a una zona geográfica puntual.
Ante la advertencia del G7 para un código de conducta de aplicaciones de la IA, ¿qué temores tenemos que tener en esta parte del mundo?
Nosotros tenemos que ser muy cautelosos, tenemos que entender que acá los intereses son cruzados y por lo general los intereses obvios, son los menos obvios, los intereses más importantes son los que menos se ven a primera vista. Entonces yo siempre digo que hay que estar alertas, hay que leer la letra chica, hay que estar muy pendientes de las decisiones que se van tomando y por sobre todas las cosas participar, involucrarse. Porque si vos no participas y no te involucras, muy difícilmente puedas hacer que tu voz sea oída o puedas cambiar el rumbo.
Por Fernanda Bireni