El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) informó que continúan desarrollándose la totalidad de los planes de la primera campaña anual de vacunación contra la fiebre aftosa y brucelosis bovina, que se inició el 11 de marzo en la zona central y litoral del país.
En el caso de Córdoba, ya se aplicaron, en estas dos primeras semanas, 850 mil dosis contra la fiebre aftosa sobre una población objetivo de 4,7 millones de animales, según explicaron desde la sede del organismo a Tranquera Abierta.
Los operativos de vacunación son coordinados de acuerdo a la estrategia sanitaria que define el Senasa, y se llevan a cabo a través de más de 300 entes sanitarios locales, que están conformados por asociaciones de ganaderos, veterinarios privados y otras entidades.
La primera etapa anual de inoculación contra la Fiebre aftosa incluye todas las categorías bovinas y bubalinas y es una de las principales estrategias de prevención para mantener una situación epidemiológica estable de la enfermedad en nuestro país.
Durante este ciclo de vacunación, además, se inocula contra brucelosis bovina a terneras de 3 a 8 meses, en todas aquellas provincias en las que se aplica en forma sistemática.
Cabe destacar que, tal como lo establece el Art. N° 11 de la Ley 24.305, y de acuerdo con los requisitos fijados en la Resolución N° 609/2017, nuestro país permite la importación, exportación, elaboración, tenencia, distribución y expendio de productos destinados a prevenir la Fiebre aftosa, los cuales deben ser autorizadas por la Dirección General de Laboratorios y Control Técnico del Senasa quien evalúa las condiciones de esterilidad, controles físico-químicos, de potencia/eficacia en la producción de anticuerpos, seguridad y tolerancia además de su pureza a fin de prevenir afecciones en los animales entre otros aspectos.
En este sentido, aquellas vacunas que se utilizan para la campaña cumplen con las normas de bioseguridad y los requisitos para el registro, la producción y el control de calidad como se mencionó.
Para su autorización en la República Argentina, debe tenerse en cuenta que los serotipos del virus (cepas) de la Fiebre aftosa a utilizar en la producción de vacunas contra la enfermedad deben ser 01 Campos, A24 Cruzeiro, A Argentina 2001 y C3 Indaial, es decir que debe ser tetravalente.