- ¿Qué buscaron con esa carta?
- Buscamos mostrar esa unidad y amalgama compacta que tenemos los cordobeses que estamos al frente de las casas de estudios. Ahí están todos los rectores de las universidades nacionales, los decanos de las sedes de la Universidad Tecnológica Nacional radicadas en Córdoba y la Universidad Provincial. Eso da cuenta de que no hay sectores, no hay sesgos y simplemente estamos ante un derecho universal que tenemos que defender.
- ¿Qué mensaje quisieron transmitirles a los diputados?
- El mensaje es que ratifiquen ese acompañamiento que nos dieron cuando por primera vez la Cámara de Diputados aprobó la ley de financiamiento y luego el Senado hizo lo propio. Ante el veto presidencial, ahora les pedimos que una vez más estén a la altura de las circunstancias y que sigan ratificando y respaldando esta ley tan necesaria para seguir garantizando el funcionamiento del sistema universitario público nacional.
- ¿Qué pasa si prospera el veto?
- Es una dinámica que hoy hace imposible saber cómo continuaríamos en esa circunstancia. Tratamos de definir medidas de conjunto, como sistema, porque no se trata de una universidad que sí y otra que no, con lo cual vamos minuto a minuto tratando de sostener un esfuerzo conjunto, colectivo, genuino, que representa todo un sistema público nacional. Dependiendo de cómo se vayan dando las cosas, analizaremos como sistema, con los representantes gremiales, las agrupaciones estudiantiles, ver cómo se sigue en ese caso.
- Hoy el CIN se ve como una entidad monolítica, más allá de los orígenes de cada rector…
- Sí, exactamente. Más allá de cómo se vino transitando en décadas anteriores, hoy lo que se ve de manera tangible es un bloque uniforme. Estamos todos detrás de este mismo derecho universal que es la educación pública. Hoy no nos diferenciamos, no estamos representando bloques, representamos principios, convicciones y derechos; y eso nos hace fuertes y legitima el reclamo.
- En ese contexto, se abrieron las puertas de la Feria del Libro, ¿cómo lo vive?
- Lo vivimos con mucha emoción porque son instancias donde resignificamos la cultura, la educación, nuestro patrimonio como territorio. Eso nos pone contentos porque además tenemos participación local, regional, de provincias vecinas. Son eventos que se van robusteciendo y que consolidan la identidad de nuestra ciudad.
- Y es la edición número 20; pasaron intendentes y rectores, y continúa…
- Es una construcción que hace a la identidad y que no queda circunscripta a una decisión coyuntural. Termina siendo patrimonio de todos.
- En un contexto complejo para la cultura…
- Pero es lo que nos mantiene viva la esperanza y el compromiso, con derechos que son irrenunciables. Eso nos permite pensar y creer que podemos sostener nuestras convicciones porque en definitiva son derechos de toda la sociedad argentina y por eso estamos firmes en ese sentido. Y a pesar del desaliento y el desánimo que a veces nos invade frente a las medidas de un Gobierno, esto se ubica claramente por encima de esas circunstancias.