“Como se muestra en mis primeros bocetos, la esencia del proyecto se orienta hacia la concepción del techo. Representa las ondas de una gota de agua. Mientras Mauro Colagreco trae el mar a nuestros platos, mi equipo y yo buscaremos acompañar al cliente al mundo de Colagreco”.
Ceto: el restaurante de lujo diseñado por un riocuartense en Francia
El proyecto desarrollado por el arquitecto Marcelo Joulia a la medida del chef argentino Mauro Colagreco ya se disfruta en su máximo esplendor. Colgado sobre el mar Mediterráneo, la obra se integra en un megahotel de la cadena Maybourne Hotels Group
Con esas palabras, el arquitecto Marcelo Joulia -quien transitó su adolescencia en Río Cuarto y fue la formación técnica del Colegio Industrial la que despertó su pasión hacia las figuras y las formas-, describe las características de uno de sus últimos proyectos concretados: el restaurante Ceto, en las costas del mar Mediterráneo, para el reconocido chef argentino Mauro Colagreco, ganador de tres estrellas Michelin en reconocimiento a la gastronomía.
Joulia explica que el restaurante está “inspirado en la mitología griega y las constelaciones de agua del cielo”.
“El Ceto de Mauro Colagreco mira las tradiciones del pasado mientras avanza, enfocándose en la pesca sostenible en sintonía con la naturaleza”, sostiene el arquitecto, quien además cuenta que dicho espacio invita a experimentar la rica diversidad del paisaje verde de la Riviera y el mar Mediterráneo. “El menú evoluciona y sigue el ritmo del agua a lo largo de las estaciones”, señala.
Un ambicioso proyecto
Marcelo Joulia, riocuartense radicado en Francia, fue uno de los cinco arquitectos de renombre internacional que el empresario irlandés Patrick McKillen contrató para construir el hotel Maybourne Riviera Hotel.
El profesional destaca que junto a su equipo de arquitectura “Naço” tuvieron el placer de colaborar con algunos de los artistas más influyentes del mundo, “para decorar este hermoso lugar que habíamos creado”. En esa nómina, destaca la participación de los artistas Pierre Paulin, Guy Bareff, Mircea Anghel y Pierre Bonnefille.
“La Riviera de Maybourne emerge de la península rocosa de Roquebrune-Cap-Martin como abriéndose camino hacia el resplandeciente mar Mediterráneo. Las espectaculares vistas de la costa abarcan Italia al este y Montecarlo al oeste, todo bañado por una luz brillante”, describe el arquitecto.
El restaurante
El restaurante que “se cuelga” sobre el mar Mediterráneo se ubica en el piso más alto de un edificio con forma de triángulo.
“Nosotros, desde mi estudio, nos ocupamos del último piso del emprendimiento, que es un restaurante con vista panorámica. Esta propuesta significó una convocatoria muy fuerte, porque el hotel que se hizo es muy ambicioso, muy moderno. Cada sector tiene a su arquitecto o a su diseñador muy importante y, en mi caso, me ocupé de la parte más alta”, sostiene el arquitecto.
Las visuales hacia el frente se abren a 180 grados y permiten ver la unión del imponente mar con el cielo y percibir la sensación de “estar flotando” sobre ambos.
El cielorraso del techo fue planteado “en resonancia con el movimiento eterno del mar, porque el mar nunca se para”, explicó.
Todas las fachadas están provistas de un sistema corredizo vidriado diseñado por el estudio de Joulia y que desaparecen “al cien por ciento”.
El restaurante está equipado con mesas y muebles diseñados por Joulia y un amigo artista radicado en Portugal.
Se complementa con una cocina totalmente a la vista y transparente pensada para la labor del chef Mauro Colagreco y equipada con un asador para pescados. El restaurante se integra al complejo del hotel, que cuenta con cinco pisos que “están colgados” de una gran roca y suspendidos hacia el mar Mediterráneo.
Javier A. Borghi