Las entidades de la mesa de enlace llegan esta noche al plazo final del cese de comercialización de hacienda que surgió como respuesta al cierre de exportaciones de carne vacuna aplicado por el Gobierno la semana anterior. Sin embargo, la protesta agropecuaria podría extenderse, según anticiparon algunos de los principales dirigentes.
Los cordobeses Gabriel de Raedemaeker, vicepresidente de CRA, y Javier Rotondo, presidente de Cartez -asociada a CRA- remarcaron en las últimas horas que “el reclamo continuará si no hay marcha atrás del Gobierno y no se reabren las exportaciones de carne vacuna”. Y no descartaron que se sumen otras cadenas, como las de los granos, a la protesta.
“Otra vez viejas recetas y fórmulas con el mismo probado fracaso. No somos quienes tenemos la llave para solucionar esta situación. Acá hay una parte que partió de un error de diagnóstico y que no convoca a sentarse a ofrecer soluciones. A tal punto que la protesta fue muy contundente. Nunca vimos una respuesta tan fuerte por parte de los productores y parte de la cadena, que entendió que es un reclamo lógico. Siempre en anteriores medidas algunos actores lograban llevar algunas cabezas a Liniers, cosa que en esta oportunidad no ocurrió. También muestra que fue una decisión que cayó pésimamente en el sector de ganados y carne”, dijo Rotondo al evaluar el avance de la medida de fuerza que finaliza esta media noche.
Más allá de que finaliza esta medianoche la protesta, los efectos podrían extenderse. ¿Hay riesgo de desabastecimiento como plantean algunos sectores?
No, no hay riesgos de desabastecimiento de carne. De hecho estamos llegando al final de la protesta y no vimos carnicerías cerradas. El negocio de la carne cambió y hay actores que tienen mucha integración, como es el caso de las grandes superficies comerciales. Incluso hay frigoríficos que son integradores de la cadena hacia adelante con distribución y abastecimiento. Algunos dicen que puede faltar entre martes y miércoles de la semana próxima en el conurbano. En el interior la realidad es distinta. Y hay incluso matarifes y frigoríficos con hacienda propia. Pero insisto en que no debería haber problemas.
¿Sigue la protesta más allá de los 9 dias anunciados?
No sabemos si la protesta termina mañana. Siempre decimos que para que eso ocurra tiene que haber una señal de llamado al diálogo y una intención de revisar posturas y aceptar propuestas. Las llaves de eso las tiene el Gobierno nacional. Pero jamás hemos recibido un llamado y el ministro de Agricultura Luis Basterra no nos atiende el teléfono, que es un ministro 100% testimonial. Parece que está con orden de no atender. Y con esa actitud es muy difícil. Sumado a que hay otros actores del negocio de la carne que aprovechan situaciones coyunturales que hacen propuestas mágicas con la rentabilidad del primer eslabón de la cadena que son los productores. Escuchamos en estos días a los grandes frigoríficos nucleados en ABC, que proponen bajar carga tributaria, calzar la barata de cortes, todo a costa del productor. Están pensando en soluciones con la plata de otro. Y además, en el marco inflacionario que venimos transitando, lo que tenemos que tener en claro es que la carne no va a estar más barata, sino más cara.
¿Por qué más cara?
Primero por el proceso inflacionario general y luego porque hay un desincentivo grande para la producción. En el último año perdimos entre 1,6 y 2 millones de cabezas, con lo cual no hace falta ser un entendido en la materia para imaginar que la carne será más cara. Y los números salen de comparar los rodeos vacunados en la campaña contra la aftosa entre marzo y mayo, que es la que se hace a la totalidad de los animales.
¿Y por qué hay menos cabezas?
Por las políticas erráticas, falta de señales, la coyuntura de Argentina y los costos de producción, el desincentivo a la producción ganadera. Y si seguimos recibiendo señales de este tipo por parte del Gobierno, la tendencia no va a cambiar. Ahora cortamos las exportaciones al mercado chino, que es una aspiradora para la categoría de vaca que no se consume en Argentina, sin saber por qué. Una vaca tiene un ternero por año y para poner la producción en la góndola, desde que se seleccionó la madre, nació el ternero, se crió, engordó y llegó a faena, Fernández termina su mandato. Los tiempos de la producción son de largo plazo.
¿Pueden sumarse otras cadenas como la de granos al paro?
El cese en la comercialización de granos es una propuesta de las rurales de base. Como parte de la Mesa de Enlace elevamos esas propuestas. Hoy hay una certeza que es que si no hay una respuesta y no se retrotrae la nefasta medida, la posición de los productores es continuar con la protesta. La bronca está y hay productores agrícolas que quieren sumarse.