“Los números no dan”, aseguró el productor porcino Néstor Ladu quien, al hacer un diagnóstico de situación, aseguró que, además del incremento de costos, tienen que lidiar con la fuerte baja en el consumo por efecto de la altísima inflación que licúa los bolsillos, y también con la competencia que puede implicar el ingreso de carne importada desde Brasil, que se plantea desleal por lo que explica Ladu: “Ellos están usando un promotor de crecimiento, la Ractopamina que acá está prohibido por cuestiones sanitarias, entonces ahí ellos estarían compitiendo de manera desleal porque no debería ingresar carne con ese anabólico, que acá está prohibido por las autoridades”.
Al explicar el por qué de la convocatoria a los productores porcinos, Heraldo Moyetta, presidente de la Rural riocuartense, manifestó que había una necesidad de escuchar lo que está sucediendo en ese sector de la producción ganadera y volvió a insistir sobre la necesidad de reglas claras que permitan un escenario previsible. “Creo que en esta postura del gobierno nacional en relación al libre mercado, sabemos y lo confirmamos hablando con ellos, que los productores porcinos están en situación de competir, pero para eso y para poder competir con los países limítrofes que hoy podrían ser proveedores de carne de cerdo para la Argentina, habría que cuidar de tener las condiciones para que nuestra carne pueda ser exportada; por lo tanto lo que se pide son las mismas condiciones, tanto sanitarias como arancelarias, además de que se analice la cuestión tributaria, porque ese componente estaría volviendo menos competitiva en la góndola a la carne de cerdo, algo que se debería revertir para proteger ese tipo de producción”, aseguró Moyetta.
En ese sentido, el productor Néstor Ladu destacó el amplio crecimiento de la producción porcina en estos últimos años y la eficientización de los sistemas para producir durante ese tiempo y, a pesar de eso, asegura Ladu: “El problema sigue siendo la relación costo-beneficio, los números no dan porque los costos son muy altos y eso hace que el número no cierre”.
Sobre el final del encuentro hubo, además, un nuevo tema que se incorporó en la agenda del sector porcino: la factura del servicio eléctrico, que en algunas zonas depende de Epec y en otras, de las cooperativas locales. En ambos casos, comenzaron a mostrar aumentos bruscos por la quita de subsidios y la recomposición en los cuadros tarifarios dispuestos por el Gobierno nacional. Uno de los productores presentes en la Rural mostró que entre las dos últimas boletas pasó de pagar 800 mil pesos a 2,4 millones por el mismo consumo. En ese sentido, las autoridades de la Rural explicaron que en las próximas semanas está agendada una reunión con autoridades de la empresa de energía provincial.
En cuanto al balance que hace de la reunión mantenida con sus pares en la Rural de Río Cuarto, Ladu aseguró que “fue muy positiva, ya que sirve para mantener en alerta a la entidad más cercana a nosotros, sobre la situación que estamos atravesando; además quedamos en seguir reuniéndonos para ver cómo avanzamos con esto”, concluyó.
