“Estamos muy contentos por el resultado del equipo”, afirmó, destacando especialmente el trabajo de los profesionales.
En ese sentido, Trotta subrayó que el geólogo de la UNRC Guillermo Sagripanti “ha tenido un rol protagónico” dentro del grupo.
Según indicó, desde el inicio de la investigación existía una presunción acerca de la ubicación aproximada de los enterramientos.
“Desde que se comenzaron a investigar las causas, teníamos idea de lugares de enterramientos clandestinos”, señaló y añadió: “Con los testimonios se fueron identificando distintos lugares”.
Y, durante los trabajos realizados en la zona señalada, aparecieron restos humanos.
Trotta detalló que se consideró también “una imagen satelital clave que daba cuenta de un movimiento de tierra”.
“La investigación va a continuar. Hemos llegado al 70% y queda un 30% más que continuará en febrero”, sostuvo.
“Los familiares de las víctimas quieren cerrar el duelo”, finalizó Trotta.