Con una estrategia que mantuvo dos vías de reclamo, una individual y otra conjunta, los integrantes de la cadena de la carne bovina profundizaron en las últimas semanas el reclamo al Gobierno para que levante las restricciones a las exportaciones de cortes vacunos que impuso de manera total el 12 de mayo y luego en modo parcial.
Vence el cepo a la carne y crece la incertidumbre en la cadena: ¿sigue?
La disposición que mantiene parcialmente restringida la exportación de cortes vacunos caduca a fin de mes, pero el sector no conoce cómo continuará. Insisten en la necesidad de "volver a la normalidad de abril"
Para los distintos eslabones que conforman el sector, desde el productor, feedlots, matarifes, frigoríficos y hasta sindicatos, la medida impulsada por el Ministerio de Matías Kulfas con participación de la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, “sólo trajo perjuicios y ningún beneficio”.
Por eso en las últimas horas, con 34 firmas volvieron a manifestarse en favor de que a partir del vencimiento de la restricción, que será el 31 de este mes, no se renueve la medida sino que se la dé de baja.
De todos modos, entre los integrantes de la cadena de la carne hay una certeza: nada será como en abril (cuando no existían límites a la exportación).
Daniel Urcía, presidente de Fifra, explica que “el propio decreto 408 establece restricción en una parte hasta el 31 de agosto, pero en cortes, hasta el 31 de diciembre. Con lo cual nosotros tenemos las esperanzas de que el límite al 50% del volumen de exportación, que es absolutamente injusta, inequitativa e inconstitucional, deja afuera a las empresas que tienen habilitación pero no antecedentes de exportación, como es el caso del Frigorífico Río Cuarto”, indicó.
Para el titular de la entidad que nuclea a los frigoríficos, “si la medida se extiende creo que se va a comenzar a evaluar el camino judicial, que hasta acá se evitó porque se pensaba que esto era momentáneo y a lo sumo duraba hasta fin de mes”, explicó Urcía.
Las expectativas positivas del sector pasan porque el cupo del 50% de exportaciones caiga y además haya alguna corrección sobre los cortes, fundamentalmente por la categoría vaca y teniendo en cuenta las empresas que sólo exportan a China y que se llevaron la peor parte.
“Lamentablemente por algunas conversaciones que venimos teniendo con algunos funcionarios eso no va a ocurrir porque como venimos diciendo desde Fifra, la agenda electoral prevalece sobre el interés general”, remarcó Urcía.
En el comunicado difundido por la cadena de la carne la semana pasada, el título indicaba que “perdemos todos”. Para Urcía, “perdemos todos los que integramos la cadena, el sector productivo. Quienes tomaron la decisión no tienen ni vacas ni frigoríficos ni venden carne, por lo cual el bolsillo de ellos no lo tocaron”, fustigó el empresario.
El titular de Fifra agregó además que “lo que sabemos parece indicar que no habrá muchos cambios con respecto a la situación actual. Y todo lo que fue ocurriendo en este tiempo vino en la misma línea. Acá hubo reuniones en las que se nos dijo que se iba a modificar en breve y eso no ocurrió. Por eso la credibilidad es muy limitada. Hay que ser claros, esta decisión la tomó el presidente Fernández, es una decisión de gobierno. No corresponde hacer nombres, hay una gestión”, remarcó el dirigente. Y agregó: “Con esta medida, Córdoba la pasa feo y tenemos un senador nacional del oficialismo que se ve que no se enteró que la carne tiene problemas.
¿No hablaron con Carlos Caserio?
Él no habló con nosotros.
¿Debería haberlo hecho?
Habrá tenido otras ocupaciones. Seguramente el país tiene problemas más importantes que la carne. Perder el país 100 millones de dólares por mes, 6.500 millones todo el aparato productivo como lo determinó Fada, no concretar contrataciones de nuevos empleos, parece que no son temas de interés.
Lo que sí, en breve habrá una novedad de continuidad o no de la medida...
Nuestra intención es darle visibilidad a esto. Y en la provincia, el ministro Sergio Busso ha seguido planteando el tema como un error. En su momento lo hizo el gobierno de Santa Fe, el de Entre Ríos. También Chaco. Bajaron después un poquito los decibeles, pero se sigue trabajando para destrabar esta situación. Se están conversando alternativas de un plan ganadero, pero si no hay una definición clara de volver al comercio libremente es difícil establecer líneas de fomento. Hay que producir un bien que no tiene libertad de comercio. Es un contrasentido.