Una vecina de la localidad se presentó el miércoles por la mañana en la dependencia policial con el artefacto explosivo de mano asegurando que se lo habían regalado a sus hijos hacía muchos años.
Ante la presencia de la granada, el personal policial convocó al personal de la División Armamentos y Explosivos, quienes constataron la operatividad de la granada.
La mujer comentó al personal policial que hacía mucho tiempo que estaba la granada en el domicilio y le generaba mucha preocupación.
El explosivo fue secuestrado y trasladado a un lugar adecuado mientras se intenta establecer su origen porque se trata de armamento de guerra y hay que cumplir con una serie de normativas.